Los talleres de arte son un espacio de educación no formal, en la cual niñ@s, jóvenes y adultos desarrollan sus capacidades artísticas y expresan sus abstracciones a través de las artes plásticas, la música, el teatro y la danza.
Los talleres están diseñados en módulos de seguimiento al aprendizaje desarrollado por l@s niñ@s, jóvenes y adultos. La otra modalidad esta diseñada en talleres libres, en donde l@s interesad@s eligen las técnicas o contenidos a explorar.
La abstracción personal se pone de manifiesto en la obra personal de cada niña, niño, adolescente, y adulto que participan o han participado en cada uno de los talleres que brindamos en nuestro Centro Cultural, los cuales atendemos de forma personalizada, orientándolos para interiorizar en sus pensamientos aquellos elementos que desean transmitir y trasladar a la sociedad, a través de la música, la danza, el teatro, la serigrafia y las artes plásticas.
Nuestra metodología de enseñanza es flexible, permitiendo la adecuación de los contenidos a las necesidades de cada tallerista participante en nuestros talleres.
Citando un fragmento de Enrique Florescano,
“…si es verdad que no extraemos ‘lecciones de la historia’, constantemente estamos aprendiendo de los hechos históricos. Los desafíos de la actualidad casi siempre nos remiten a las encrucijadas del pasado, y muchas veces los acontecimientos sirven de ‘principios orientadores de nuestras acciones presentes’. Pero todo esto nos lleva a la conclusión de que la ‘historia no nos enseña nada’, puesto que ‘somos nosotros los que, aprendiendo de ella, nos enseñamos a nosotros mismos.
Taller de Verano en Artes Plásticas Noviembre -Diciembre 2010
Grupo Dutriz/ La Prensa Gráfica.
La historicidad, la historia, somos nosotros. Somos nosotros los maestros y los discípulos en esta escuela que es nuestro planeta…La historia no ‘continúa avanzando’ porque no avanza en absoluto.
En este caso los procesos en las Artes mediante sus diferentes expresiones, requiere ese dinamismo que trascienda al ser humano a otros estadios que influya en la sociedad en propuestas nuevas, que revitalicen los procesos de cambios estructurales de fondo y no de forma en nuestras sociedades actuales, sin olvidar nuestro pasado ancestral. Todos escribimos la pagina de una historia y de muchas historias de forma individual y colectiva, retomando una frase insignia en el trabajo comunitario que se desarrollo desde ASTAC la cual dice: "El hacer individual es un todo indivisible con la colectividad."
En este proceso la creatividad juega un papel clave para retomar parte de la huella que otros nos han legado y formular nuevas propuestas, sin caer en los viejos paradigmas que nos atan en el presente y detienen nuestro avance hacia el futuro.
Según el antropólogo Jacques Maquet (1986), una obra de arte es algo que estimula y mantiene la contemplación. Obliga a la atención y a la reflexión. Maquet enfatiza la importancia de la forma del objeto en la consecución de esa contemplación artística. No obstante, otros estudiosos enfatizan el sentimiento y el significado además de la forma. La experiencia del arte implica sentimientos, como sentirse conmovido, además de la apreciación de la forma, como el equilibrio y la armonía.
(
Tomado del libro Antropología Cultural de Kottak 9a. edición).
Son estos elementos como los sentimientos y la concepción mental de la forma, los que nos marcan pautas para re-descubrir aquellos elementos visibles y ocultos en nuestro interior, para expresarnos y comunicarnos con los demás. Ciertamente la parte academicista da ciertos elementos teóricos y prácticos , en esta construcción mental de la búsqueda de identidades, que nos posibiliten navegar en medio de la incertidumbre que vivimos a diario en nuestras sociedades actuales. Sin embargo es la práctica constante y permanente, en la búsqueda de nuevos horizontes la que nos permite, a través de nuestro legado ancestral, dejado por los primeros homínidos en el estadio de la "Prueba y Error"; trascender del plano academicista en frío, que muchas veces nos limita y nos vuelve egoístas. El conocimiento al compartirlo trasciende y nos habré una nueva puerta en la búsqueda del conocimiento, para sensibilizarnos y tratar de ser menos conflictivos entre nosotros mismos; donde la tolerancia y la armonía pueda volverse nuestra bandera utópica para seguir gravitando en esta sociedad actual.
Miguel Ángel Hernández V.
